No sé quienes sois, pero el otro día escribí un cuento que se parece a lo que os ha pasado. Espero que os guste. Como es un cuento, no tengo fotos, así que, ya las pondréis vosotros.
Érase una vez un cuento.........
En un lejano país, habían dos duendes que querían conocer a más duendes. Un duende era barbudo y barrigón. El otro, era un duende joven y soñador. Soñaba con unos extraños cachivaches con ruedas grandes y muy ruidosos.
Nadie sabe como, esos dos duendes conocieron a otros dos duendes, los duendes montañeros.
El duende montañero mas alto tenía un cachivache muy extraño. Era de color verde, con unas ruedas muy raras y le encantaba ir saltando con su cachivache por las piedras de la montaña. Le llamaremos el duende saltarín.
Al otro duende también le encantaba ir por la montaña, pero además era mago y hacía que los ojos de los cachivaches se encendieran. Le llamaremos el duende mago.
El duende barbudo, el duende soñador, el duende saltarín y el duende mago pensaron que sería muy divertido conocer a otros duendes y se pusieron manos a la obra.
Hicieron sonar las campanas de la iglesia y empezaron a acudir duendes y mas duendes. Llegaron tantos duendes que tuvieron que dejar de hacer sonar las campanas porque había un duende malo que no conocían y se enfadó.
El duende malo quería que ningún duende se reuniera, pero la ilusión de todos los duendes por estar juntos hizo que el sueño de los duendes buenos se hiciera realidad.
Y lo mas curioso del cuento es que cada duende venía montado en un cachivache parecido al que tenían los otros duendes. Habían duendes grandes, muy grandes, pequeñitos, muy pequeñitos, rubios, altos, bajos, gordos, barbudos, sin pelo, con el pelo largo, con el pelo corto, rubios, morenos, etc, etc, etc.
Todos los duendes se reunieron, comieron, cenaron, durmieron, bebieron, rieron, montaron en sus cachivaches, cruzaron rios, montañas y valles, y no hicieron nada malo. Así que el duende malo se quedó con las ganas de estropear la gran fiesta de los duendes buenos.
Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.